La problemática actriz estadounidense Lindsay Lohan deberá internarse 90 días en un centro de rehabilitación, hacer trabajo comunitario y recibir psicoterapia, según un acuerdo con la fiscalía alcanzado este lunes por haber mentido a la policía sobre un choque en 2012.
El juez James Dabney señaló que Lohan “aceptó la oferta de la fiscalía” y deberá internarse 90 días en un centro de rehabilitación cerrado -del que no podrá salir-, luego hacer 30 días de trabajo comunitario y completar 18 meses de psicoterapia.
La actriz de “Mean Girls” fue condenada además a dos años de libertad condicional y cinco días de prisión, pero los abogados señalaron que básicamente Lohan sería sólo ingresada y vuelta a liberar de inmediato.